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Errores más comunes de Pilates y cómo solucionarlos

errores comunes en Pilates

Sabemos que cuando acudes a tu sesión de Pilates, lo que quieres es aprovechar al máximo tu práctica de esta disciplina, pero en ocasiones, se cometen pequeños fallos que no te permiten avanzar en tu aprendizaje de este método. Por todo ello, hoy queremos mostrar cuales on los errores más comunes de Pilates y cómo solucionarlos, para que lo tengas en cuenta en tu próxima sesión.

En nuestras clases de Pilates en Alicante Bio Ems, los monitores/as altamente cualificados te mostrarán cómo se debe hacer cada ejercicio correctamente, pero si además tienes en cuenta estos tips, verás como evolucionas con mayor rapidez.

¿Cuáles son los errores más comunes de Pilates?

· No respirar correctamente 
La mayoría de los ejercicios de Pilates están pensados ​​para fluir y coincidir con la respiración. En torno a este concepto se trabajan los movimientos de la columna y la secuencia de los ejercicios. Esto es para que el nuevo oxígeno nutra los músculos y la sangre mientras limpia el aire viejo y viciado al exhalar.

Deberías poder respirar mientras usas los músculos del abdomen, porque la respiración ocurre en los pulmones. No se trata de tener que aspirar o endurecer el estómago, se trata de estabilizar la pelvis y alinear la respiración. Muchas personas nuevas en Pilates descubren que realmente les ayuda practicar un levantamiento suave de la parte inferior del abdomen y una respiración profunda en toda la caja torácica. Una excelente manera de aprender esto es recostarse boca arriba, con las rodillas dobladas, sintiendo la inhalación en los lados de la caja torácica mientras permite que las costillas traseras se expandan suavemente hacia la colchoneta.

Pilates se trata fundamentalmente de la salud, la integridad, la fuerza y ​​la flexibilidad de la columna. Mientras están en la misma posición supina descrita anteriormente, algunas personas nuevas en la conciencia de la respiración encuentran útil sentir los movimientos muy sutiles de la columna vertebral al inhalar y exhalar.

· Esperar hacerlo bien a la primera 
Pilates es una práctica y, a menudo, implica «desaprender» viejos hábitos y patrones que a menudo son la razón por la que recurrimos a pilates. Los mejores aprendices de pilates son aquellos que tienen una mentalidad abierta y están dispuestos a darle una oportunidad. La belleza de esta práctica es que evoluciona y cambia con el tiempo, pero siempre es consistente.

· Forzar demasiado 
La idea de pilates es dejar que el core haga lo que se supone que debe hacer: estabilizar y proporcionar una base para que otros músculos puedan confiar para que no tengan que trabajar demasiado.

Exagerar el esfuerzo muscular nos impide trabajar nuestros músculos estabilizadores más profundos. A veces, menos esfuerzo permite que los músculos correctos trabajen y otros músculos se ablanden y liberen la tensión.

Cualquier tensión muscular, nudo, agarre o calambre es una señal de que te estás esforzando demasiado en un área en particular. La clave es soltarse, reagruparse y reconectarse con el núcleo y propósito del movimiento, y luego proceder con más atención.

Con la práctica, aprenderás que es posible relajarse y al mismo tiempo fortalecer el cuerpo.

· Distracciones 
Trata de mantener las distracciones al mínimo para que puedas aprovechar al máximo la sesión, ya sea en casa o con un instructor. Si hay algo que te estresa, o tienes una lista de cosas que debes hacer, o te preocupa que puedas olvidar algo, escribe tus pensamientos o tareas y trata de olvidarlos para tu tiempo de Pilates. Vuelve después con una nueva perspectiva.

· Olvidar lo que realmente es el núcleo 
Tu núcleo no es solo tu estómago. Son los músculos profundos del abdomen, la caja torácica, la espalda, los omóplatos, las caderas, las nalgas y el suelo pélvico. El hecho de que alguien tenga un six pack ondulante no significa necesariamente que tenga un núcleo fuerte. Tu core es la base y la base de otros movimientos. Joe Pilates llamó al núcleo la central eléctrica por esta misma razón. Tener un núcleo fuerte promueve una buena alineación, lo que a su vez evita que los músculos periféricos trabajen demasiado y se esfuercen.